
Por/ Cristian Holguin
llegó en el momento preciso al equipo perfecto porque no se sabía si sería el primera base para la temporada de 2019. Estaba tratando de ganarse un puesto en el Spring Training aunque los Mets de New York sabían que era sólo para darle confianza y ver qué pasaba con el muchacho que lideró las Ligas Menores en jonrones y empujadas en 2018.
Los Metropolitanos lo pusieron a jugar y participó en 22 juegos de pre temporadas y el muchacho resolvió bateando .352 con 4 cuadrangulares y 11 remolcadas, con esos números no había dudas de él y al final los Mets anunciaron que Pete Alonso sería su primera base para la temporada de 2019.
Desde que debutó el 28 de Mayo le presté mucha atención al novato primera base de los Mets, y después de las dos primeras semanas de la temporada recuerdo le dije a un grupo de periodistas hispanos en el Citi Field, «si lo dejan jugar tranquilo pega más de 30 jonrones,» todos me miraron asombrados como queriendo decir, «muy difícil», ya que el Oso había comenzado un tanto lento, algo común en jugadores de primer año. Pero cuando terminó el primer mes de temporada (abril), sus números fueron .325-8-21, excelente, y lo demás es historia.
El muchacho de 23 años de edad, nacido en Tampa y de origen Español llegó para quedarse y envió un mensaje, esto es sólo el comienzo, lo que vendrá será mucho mejor. Y mejor aún es, que aparte de su gran excesivo poder, el primera base ha llevado su carisma más allá del terreno puesto que Alonso parece estar dentro de la fanaticada imprimiéndoles energía y entusiasmo, los fanáticos lo ovacionan y él responde con mayor emoción.

La temporada seguía su curso y Pete Alonso no paró de disparar cuadrangulares uno detrás del otro hasta llegar al 30 de Septiembre, último día de la temporada, Alonso caminaba hacia la caja de bateo, el público enloquecido se puso de pie y le rindieron un largo homenaje a su nueva estrella que llegó al Citi Field. Sucedió que en la tercera entrada con dos outs y sin hombre en base, el llamado Oso polar pegó un palo descomunal hacía las gradas llegando a 53 cuadrangulares en la temporada, convirtiéndose en el jugador de primer año con más jonrones en una temporada dejando atrás los 52 jonrones disparados por Aarón Judge en 2017.
El nuevo rey del jonrón en las Mayores rompió todos los records de un novato, de su equipo y de la Liga Nacional. Su gran temporada sirvió para que todos vean que su poder es natural, así lo demostró en el Juego de Estrellas celebrado en Cleveland, ganando la competencia de jonrones con relativa facilidad, aunque hay que destacar que ganó la competencia gracias a que siempre le tocó batear de último en cada ronda, por lo que sólo necesitaba conectar un jonrón más que su rival, por lo que de ese modo llegaba más descansado a las rondas.
El premio que se llevó fue de un Millón de Dólares, casi el doble de su salario en 2019.
Alonso de origen Catalán, fue seleccionado en la segunda Ronda del Draft Amateur del 2016 por los Mets de New York y antes de ser firmado jugaba para la universidad en la Florida en la NCAA y en tres años allí bateó .316-23-124. Inició su recorrido en el sistema de Liga Menor de los Mets quienes lo asignan a Brooklyn Clase A en 2016, alli jugó 30 partidos donde terminó bateando .321-5-21. Al año siguiente juega dos clasificaciones, Clase A y Doble A, y en 93 partidos en que vio acción terminó con .289-18-63, evidenciando un gran progreso. Ya para el 2018 la organización querían verlo en las dos clasificaciones fuertes y lo mandaron a jugar Doble A y Triple A y el resultado final fue .285-36-119, líder en jonrones y remolcadas en las Menores.

No había que buscar más, el muchacho era una realidad, su actuaciones corrían en boca de todos, donde quiera que jugaba los palos que conectaba eran descomunales, su gran fuerza para conectar batazos de largo metraje lo dejó sentir en la Liga de Otoño de Arizona disparando un jonrón nunca visto en esa Liga. Lo mismo ocurrió en el Juego del Futuro cuando conectó un larguísimo jonrón por la banda contraria y después para dejar asombrado a los ejecutivos de los Mets, Alonso conectó jonrón al primer pitcheo en su primer turno en la Liga de la Toronja.
Con 6’3 y 245 libas, el sensacional jugador superó los 39 jonrones disparados por Cody Bellinger de los Dodgers de los Ángeles, quien tenía el record para un jugador novato de la Liga Nacional. Más adelante cuando el súper novato disparó su jonrón 42, quebró el record en una temporada para un jugador de los Mets, record que tenían Carlos Beltrán (2006), y Todd Hundley (1997) quienes habían disparado 41 jonrones cada uno.
Pete Alonso rompió el record de un novato en una temporada, el de un jugador en el equipo de los Mets y el de la Liga Nacional.
Lo único malo fue, que después de tantos palos, su equipo, los Mets de New York no pudieron llegar a la postemporada.