Por/Cristian Holguín
CitiField, New York, el trabajo que ha venido realizando el novato relevista dominicano es digno de resaltar. Seranthony Domínguez se ha comportado como todo un estelar cerrador en una gran parte de la temporada de 2018.
A pesar de haber comenzado jugando en dos clasificaciones a comienzos de campaña, primero en doble A, Reading, después fue subido a triple A, Lehigh Valle, para más tarde ser llamado a lanzar en Grandes Ligas y donde el novato de 24 años de edad hizo su debut y parece ser que llegó para quedarse.
El nativo de Esperanza, tubo ocho presentaciones perfectas en sus primeros 11 partidos. A lo largo de la temporada como todo jugador de primer año sin experiencia, ha tenido sus altas y sus bajas, pero naturalmente como Domínguez posee un talento natural sus dotes de buen lanzador lo ha llevado por el camino del éxito.
Hablamos con Seranthony Domínguez en una visita de los Phillies en el Citifield y nos decía lo feliz que se sentía de haber cumplido su sueño de jugar en las Mayores y muy orgulloso de representar a la organización de los Phillies de Philadelphia, «estoy agradecido del equipo de los Phillies porque me dieron la oportunidad y creyeron en mi. El llegar a Grandes Ligas fue mi sueño desde que firmé como profesional,» dijo Seranthony.
Cuando le preguntamos por su rol en el equipo y si se sentía bien lanzando en el séptimo u octavo episodio o si quería ser cerrador del equipo y a esto nos dijo, «donde quiera que me pongan tengo que hacer el trabajo, lanzare donde el mánager crea que es mejor.» Y siguió diciendo, «preparador o cerrador, no tengo problema, yo lanzaré donde ellos crean sea mejor,» terminó diciendo Domínguez, quien impuso una marca en el equipo con seis presentaciones consecutivas sin permitir hits, ni carrera, ni otorgar bases por bolas para un relevista empezando su carrera.
En su gran labor en 2018, el lanzador derecho de 6’1 y 225 libras, trabajó en 58.0 entradas donde terminó con marca de 2-5 con 2.95 de efectividad, salvando 16 partidos en 20 oportunidades. Pero mejor fue, que tuvo 11.5 ponches por cada nueve entradas lanzadas. Todos sus números son de sobradas calidad.
Domínguez debutó en la Liga Dominicana con los Gigantes del Cibao en la temporada de 2016, donde apenas lanzó tres entradas. Volvió en la siguiente temporada y aquí trabajó en 7.1 innings con 8 hits permitidos y 8 ponches. A partir de ahí no ha visto acción mas en Lidom. Resumiendo sus dos cortas temporadas con los Gigantes, Domínguez tubo 1-0 con 5.23 de efectividad en 9 partidos donde trabajó en 10.1 entradas,11 hits, 8 carreras de las cuales 6 fueron limpias, 9 bases por bolas y 13 ponches.
Síganlo porque parece que estamos en presencia de un gran lanzador en el relevo corto, largo o cerrador en el equipo de los Phillies de Philadelphia.
